La crisis del coronavirus y su impacto económico y social en las familias españolas han reabierto el debate sobre el impuesto de sucesiones, posiblemente una de las tasas que más polémica ha suscitado a nivel político y que algunas formaciones abogan ahora por suprimir ante la actual emergencia sanitaria. Expertos consultados por Efe insisten en las dificultades que entraña tal propuesta, entre otros motivos, porque la autoridad competente para adoptar cualquier decisión sería cada comunidad autónoma, no el Estado, y recuerdan que muchas de ellas ya han suspendido el pago del impuesto durante el estado de alarma.
En la práctica, su aplicación podría suponer un «agravio comparativo que vulneraría el principio de igualdad recogido en la Constitución», expone el abogado experto en derecho de familia de Sanahuja Miranda, Ignasi Vives, para el que «no tendría ningún sentido suprimirlo a unos sí y a otros no».
«Otra cosa distinta sería que se adoptaran medidas para flexibilizar el pago del impuesto a todos los obligados», esto es, a todas las personas que, con independencia de la causa de la muerte de su allegado, recibieran una herencia durante estos días, añade en reportaje de la agencia EFE.